Injustas criticas a la Autoridad Metropolitana de Autobuses (AMA)

    Las criticas toman un importante papel en la sociedad; destacan injusticias, malversaciones financieras, o meras mentiras que distorsionan nuestra perspectiva de la realidad. No obstante, toda critica tiene que estar fundamentada desde la verdad y la justicia. De no serlo, esta se convierte meramente en herramienta del que intenta derrocar, dando a un resultado peor del que inicialmente se intentaba.

    Durante esta semana he escuchado un sinnúmero de criticas hacia la Autoridad  Metropolitana de Autobuses (AMA).  Que si sus trabajadores son unos vagos; que si tiene un enorme deficit de $84 millones anuales; que si costaría mas darle taxis a todos los usuarios que tomar la 'guagua' (el termino puertorriqueño por autobus), etc etc etc.  Se critica al trabajador, ignorando el papel de la administración, y reclamando la privatización como "solución" a todo problema.  Aquellos comentaristas quienes deberían de demostrar un análisis juicioso del asunto, meramente repiten lo que escuchan como papagayo: "Cu-cu ru-cu", demostrando tan agil dominio del asunto como la gallina que cacarea todo el dia.

    No pretendo ser un experto sobre el asunto, pero es contundentemente obvio que las criticas que se han realizado son sumamente injustas y podríamos clamarlas como "no-profesionales".  Clave en todo el asunto es que todo sistema de transportación, como de comunicaciones, esta sujeto a dinámicas de redes ('network'); solo al entender estas dinámicas de redes es que podemos empezar a entender algo de lo que le esta ocurriendo a la AMA.

    El mejor ejemplo esto es precisamente la injusta critica señalando la M1, la ruta entre Viejo San Juan y Hato Rey, como las 'respuesta privatizadora' de la "crisis" en la AMA.   Hace chavos, es barata, y me lleva a los sitios donde quiero ir con rapidez. Es sumamente fácil darle la ruta mas gananciosa a un tercero, removiendo dicha fuente de ingreso de la organización matriz (AMA), mientras que se le impone a dicha organización responsabilidad por todas las rutas mas indeseadas sin que el tercero tenga responsabilidad alguna por las rutas costosas que se encuentran en el sistema de autobuses.  Se comete doble injusticia cuando luego se utiliza este beneplácito y subsidio corporativo para alegar la privatización de TODAS las rutas, que francamente constituye la destrucción de la infraestructura de transportación.

    Toda red de transportación va a estar compuesta de rutas 'gananciosas' y rutas 'perdidosas'.  Las rutas gananciosas, como la M1, sera caracterizado por cortas distancias y una alto volumen de pasajeros.  Las rutas perdidosas, como supondrán, son aquellas opuestas a estas: largas distancias y pocos pasajeros, semejante a las redes de telecomunicaciones en la ruralía quienes la mayoría de las corporaciones tendían a rechazar en la historia temprana del telefono.

    He aquí donde peca la administración y donde los comentaristas políticos/radiales se dejan engañar.  Mediante la misinformación, se esconde el papel que dicha administración ha tomado en rendir la AMA en el atolladero que esta, hechandole la culpa a los trabajadores que ahí laboran.  Es un esquema de fraude institucional comúnmente visto en la historia de las relaciónes entre estado y empresa privada.