La tomadura de Rossana

    Me atrevo a decir que quizas unos de los legisladores mas respetados y admirados, tanto por su fibra moral, su conscientizudo sentido de responsabilidad al prójimo y su obvia belleza natural, es la Senadora Lopez Leon. La senadora Lopez Leon dignamente había servido como la primera Procuradora de las Personas de Edad Avanzada durante las dos administraciones de Sila Maria Calderon.  Luego de una decada de ocupar el cargo, su forzada salida para el 2008 por el PNP causo algún malestar publico que propulso su candidatura al senado en el 2012. 

    Recientemente la Senadora Lopez ha prestado su buen nombre a proyectos relacionados a la ciencia y la tecnología. 

    A prima facie, esto pareciera tener nada de malo y, sin duda alguna, la Senadora Lopez Leon ha ayudado a restablecer muchos de los errores que cometió la administración Fortuño, tal como devolverle los terreros que habían sido forzosamente removidos de la Estación Experimental Agrícola de Gurabo. (01.02.2013 :: RCS0001)  Igualmente la bien intencionada senadora ha fomentado la creación de huertos caseros en conjunto con el Colegio de Ciencias Agrícolas de la UPR, entre otras medidas. (05.05.2014 :: RCS416)

    Lamentablemente, su esfuerzo en parar la 'fuga de cerebros' o que la actividad cientifica local genere fondos por su propia cuenta, la Senadora ha cometido un grave error en el campo de la politica publica de la ciencia. 

    Después de todo, unos de los errores mas grandes que puede cometer un legislador, senador o representante, es brindarle su reputación e imagen moral a un proyecto del cual tiene poco conocimiento o "expertise". 

    Escuche a la Senadora Lopez Leon por la radio recientemente argumentar a favor de licenciar conocimiento que se había generado en la universidad; lo que en ingles se refiere como "patent", que hemos de distinguir de su uso en la isla al referirse a un impuesto municipal ("patente").  La honorable senadora argumento que, la formación de dicha patente ayudaría a generar ingreso, empleos y cesar la fuga de cerebros de la isla. 

    A cualquier persona que desconozca del tema, esta alegación publica sonará como una excelente idea--un error que, lamento decir, ocurre con demasiada frecuencia en Puerto Rico. "No es mala idea. A legislarlo."  El problema con esta noción en particular es que conflige directamente con el propósito fundamental de la universidad: la generación y difusión de conocimiento.  El momento que se empieza a patentizar la información generada por la universidad, se genera una serie de incentivos y/o conflictos de intereses dando que la universidad limite la difusión de información que se genera en sus pasillos, o lo que llamamos una 'publicación' y/o 'articulo'. (El problema, de hecho, es uno que se ha visto a través de múltiples universidades en Estados Unidos, obviamente bajo la influencia corporativa que tanto fue favorecida por el previo régimen legal.)  

    Esta dinámica es una muy común que se da en el mundo corporativo, donde se puede observar el choque agudamente: tan severamente que lo que debería de haber entrado al foro publico (conocimiento libre) es esclavizado por jaulas burocráticas y legales, a tal punto que se ha extendido el derecho a la patente de 14 años originalmente a un siglo.  

    Otro semejante error cometido por la honorable senadora es en la promoción de incubadoras de negocios dentro de la universidad.

    Nadie cuestiona la idea que se debería de tener algún tipo de incubadora de negocios en la isla; es quizas una noción clave para el desarrollo de Silicon Valley en California--el natalicio de la computadora moderna.  El problema aqui es que es una función que ciertamente no debería de recaer en la manos de recintos universitarios públicos por la simple razón que tendra a tener un caracter 'parasítico'.  Ha sido, y debería de ser, la responsabilidad de entes financieros.

    La cultura de los "startups" (incubadoras) californianos se caracteriza por la mas aguda de las competencias, tipicamente limitandose a iniciativas por varones debido que son quienes tienden a tener el 'empuje' para sostener tan arduo proceso. (Nada en contra de las féminas, pero es meramente una descripción de la tendencia de conducta humana inata que se puede observar.)  La gran mayoría de los startups en Silicon Valley no son exitosos; solo un 10% de todos startups tienen algún nivel de éxito, y solo una fracción de estos llega a un estatus de algún éxito de envergadura.  Todos los involucrados saben el potencial, al igual que el riesgo, y deciden vivir vidas muy sacrificadas para intentar que sus criaturas salgan a flote: duermen en sus carros por varios años, comen sopas de fideos por largos meses, etc. etc.  

    ¿Cuales son los criterios utilizados por la RUM en su evaluación de nuevos negocios?  ¿Cuanto tiempo facilitara la universidad en otorgarle fondos a los ingenieros?  ¿Cual es el nivel de sacrificio e inversión por parte de los iniciadores en las iniciativas?  De lo que he visto, las contestaciones a estas respuestas no son muy halagadoras.

    Le recomiendo a la Senadora Lopez Leon que trate delimitar su actividad legislativa a asuntos sobre los cuales ella tiene un profundo conocimiento.  De otra manera, temo que le estarán tomando el pelo sin que se de cuenta de la tomadura--todo los los mas genuinas de intenciones benéficas.

    Como se dice en Texas, "The road to hell is paved with good intentions."