La torpe decisión de Pedreira y el peligroso populismo del PPD

    Sale a relucir que el Senador Pedreira logro una propuesta de derogar la entrega los fondos a las fundaciones de los ex-gobernadores, algunas de las cuales carecen al momento de centro físico alguno.  Por ejemplo, la Fundación Carlos Romero Barceló, quien iba a utilizar una estructura cerca del Centro Judicial de Hato Rey, todavía carece de edifico. Otras fundaciones que lograron recibir fondos estatales, con actual instituciones  físicas, son las de Sila María Calderon y Pedro Rosselló. En vez, el senador Pedreira logro que los pequeños ahorros de $2 millones fueran destinados al Centro Medico.

    Parece que, al reaccionar a Luis Fortuño, el Partido Popular ha embarcado en un peligroso populismo tan dañino como el elitismo de la administración que le precedia.  

    La historia escrita no nace 'de la nada'--de chismes de calle--sino que esta materialmente fundamentada en documentos 'vivos, pateando y coleando' que pueden ser constatado por otros académicos.  Por lo tanto, un genuino y autentico sentido de identidad esta fundamentado en un nivel de materialismo, que a su vez requiere un mínimo nivel de fondos para preservar dicho materiales.  Sin estas fuentes, la base fundamental de toda historia desvanecería, dando que los escritos que historiadores producirían sería basura, de poco valor relativo al papel en que se imprime. Sin fondos, no hay archivos; sin archivos, no hay historia.

    El error de Pedreira consiste no necesariamente en la derogación de los fondos directamente a los gobernadores, sino en desvirtuar los pocos fondos que iban hacia las humanidades en Puerto Rico hacia algo consumado de crecientes e aparentemente interminables fondos: la medicina. Es bien conocido que el porcentaje de fondos destinados a la medicina, como porciento del GDP en EU y PR, ha aumentado de 4% un chocante 20%--aumentando a un ritmo MUCHO MAYOR que la taza de inflación.

    Es decir, mediante la búsqueda populista de votos, el Senador Pedreira le acaba de quitar de los que tienen poco, para darselos a los que tienen demasiado--contrario a la caracterización que uno ve en los medios.

    La pena de esto es que, como regla en general, lo poco que se le da a la humanidades tiende a resultar de mayor contribución que en otras disciplinas; con poco se logra mucho relativo a las metas y objetivos de la disciplina.  Por ejemplo, de haber mantenido esos $ 2 millones dentro de las humanidades, se pueden haber comprado maquinas de digitalización y programación OCR (optical character recognition) para digitalizar localmente TODOS los periódicos que han existido en la isla--algo que hubiese genuinamente revolucionado la profesión de la historia. 

    Pero, en vez, es senador Pedreria degolló algunos de las pocos archivos históricos que existen en la isla. El sentido de tragedia es aumentado cuando se considera que dichos archivos eran nuevas entidades que acababan de nacer, y cuyo genuina contribución todavía no había sido realizada.  Solo una pequeña fracción de los materiales de estas instituciones han sido analizado por historiadores.   

    Una vez más, la reaccion extremista a previas administraciones gubernamentales entorpece decisiones, y afecta detrimentalmente los intereses colectivos de Puerto Rico a largo plazo.

    PD. No hemos de señalar la curiosa ironía de la legislación, debido la nomenclatura del senador con el reconocido académico Antonio Pedreira. A. Pedreria fue uno de los 'padres' de la cultura - identitario de Puerto Rico durante la decada de 1930,  laborado por largos años en la Biblioteca Lazaro de la Universidad de Puerto Rico en Rio Piedras antes de su temprana muerte a la edad de 47.