Ser nosotros mismos

    Estuve escuchando una charla el otro día realizada por el hijo de un político fallecido y lamento decir que sonó algo trillado.  En vez de hablar sobre sus experiencias personales con su padre, posiblemente al describir todas las angustias que su padre sintió durante momentos difíciles, el hijo se puso a pontificar sobre uno que otro elemento de la política puertorriqueña.  En vez de describir vivencias domesticas, del cual estoy seguro tuvieron que haber muchas debido a la participación revolucionaria de su padre, el hijo se puso a hacer comparaciones institucionales de poco peso.  En vez de darnos detalles sobre la vida emocional e identitaria de su padre--posiblemente de su niñez, el hijo utilizo el momento para posiblemente intentar de lanzar una posible futura candidatura política.  Es decir, lejos de iluminar a su audiencia sobre la persona que fue su padre, el hijo trato de convertirse en su padre.

    Pero no es la única vez que he visto la ausencia de autenticidad en una exposición publica.  

    Lamento decir que un articulo publicado por mi propio padre en el periódico "San Juan Star" para eso del 2001 también fue caracterizado por esa falta de exposición personal que tipifica toda buena escritura.  No puede haber duda que mi padre era un buen escritor y pensador--a tal punto que 'motu propio' llevo un caso exitosamente hasta el Tribunal Supremo de Puerto Rico a pesar de no haber sido abogado o de jamas haber tomado un curso de leyes en su vida.  Aun así, me dio mucha pena leer su articulo sobre el trolley en San Juan.  En vez de relatar algunos de los muchos cuentos que me había hecho sobre cuando el era niño y usaba el trolley diariamente, mi padre se puso básicamente a 'citar' fuentes segundas.  Lo que hubiese sido una oportunidad excelente para dar a conocer la vida cotidiana durante los principios del siglo veinte se convirtió en una superficial discusión académica.  Mi original insistencia en la divulgación de sus experiencias resulto de poco fruto. 

    Esa marcada ausencia de autenticidad es algo que parece tipificar demasiadas exposiciones publicas en Puerto Rico.  ¿Podría ser un ejemplo mas de lo que Carlos Galliza se refiere como la 'internalizacion del colonialismo' ?  Desconozco, pero no seria una interpretación muy distante de la realidad.  

    Lo que si conozco, por experiencia personal al igual que como historiador, es que esa ausencia de genuina exposición de pensamiento y sentimiento resulta ser algo tragico para la isla.  Mientras que historiadores en Estados Unidos tienen aceso a millones de documentos que capturan la vida interna de los individuos, tal parece ser el nivel de competencia y regateo en el foro publico, que tales documentos 'desvanecen' de nuestras arcas colectivas al nunca ser escritas en primer lugar.  Tal es el énfasis sobre la imagen publica de las personas, que se pierde 'como gotas en la lluvia' los rastros genuinos de la vida interna.

    En el proceso de esta falsa exposición publica, se pierde de nuestra vida colectiva aquellas semillas que nutren nuestra cultura e identidad nacional, debilitando las raíces del puertorriqueñismo en el proceso.