Tropos puertorriqueños: "Incentivando el comercio"

    En ese dialogo continuo que se ha estado dando frecuentemente en los espacios públicos del país, uno escucha continuamente que se tiene que "incetivar" el comercio, el negocio, la manufactura etc.  Se escucha tan frecuentemente, que uno supondría el comercio ser la criatura mas frágil del mundo, que de cualquier cosa se derrumbaría para nunca volver a existir--algo como las especies que continuamente están cayendo en extinción DE VERDAD en este periodo histórico (siglo XXI).  Me tienen que disculpar, pero cada vez que escucho la necesidad de 'incentivar el comercio', la imagen de un niño obeso y gordito pidiendo que le den una paleta para que haga ejercicio" es lo primero que se me ocurre.  "Ay Juanito!  Lo que tu quieras.  Aquí esta tu paletita, para que te de energía para correr."

    Oh, please.  

    Cualquier persona que tenga algún conocimiento de negocios sabrá que los negocios brotan casi por su propia cuenta; son casi como la hiedra que crece por cualquier lugar--incluso en los mas inhóspitos.  El hecho es que el ser humano siempre tendrá múltiples necesidades y siempre estará dispuesto en ofrecer un servicio o producto para recibir otro a cambio.  Desde las sociedades mas primitivas de Papua New Guinea, en el cual se intercambiaban conchas y otros objetos que hoy no parecerían tener valor por todo lo que posiblemente se podía imaginar en una sociedad premoderna--incluso el matrimonio.  Al ser una criatura 'externa', el intercambio de bienes esta casi construido en nuestro DNA humano; es la manera de movilidad social logra  y el poder económico se obtiene, sirviendo quizás como todo fundamento de base poder político.  

    Decir que se tiene que 'incentivar el comercio' es como alegar que necesitamos hacer politica publica para que los pájaros vuelen o los peses naden.  

    Lo que quizás no sea obvio del reclamo es que el comerciante típicamente querrá maximizar su rendimiento mientras que minimiza su esfuerzo--o por lo menos aquellos de poca imaginación y visión social.  Para estos pejes, el propósito del negocio es paradojijamente iniciar una actividad para tener el mas mínimo de actividad humanamente posible (en sus mentes)--una chocante contradicción del cual pocos que lo creen se dan cuenta.   Inversamente, lo que no ven en su reclamo de 'incentivo al comercio' es la iniciación de una serie de obligaciones mutuas entre el gobierno y la empresa publica que harán de estos (comerciantes) sirvientas del estado.  Naturalmente, mientras mas ayudas pides y recibes, mas a cambio te veras obligado a devolver a cambio--otro rasgo universal de 'intercambio justo' que se ve hasta en nuestros primos monos y simios.  Si pides ayuda, a tu vez vas a tener que devolver dicha ayuda en el futuro.  Es la base de toda sociedad socialista, premoderna, colonial y moderna.

    Curioso, ¿no?  Por lo tanto...

    Creo que seria mejor política de los comercios que, en vez de iniciar una rhetorica publica llorona que terminara haciendo de ellos sirvientas del estado, creo que será mejor que estos mismos se 'aprieten los pantalones' y se pongan a operar sus empresas 'como Dios manda".  Solamente al ejercer sus funciones al máximo de su potencialidad y racionalidad es que estos impulsaran la isla hacia una genuina prosperidad común.  El sector comercial puertorriqueño tiene demasiados gorditos pidiendo limosnas--sin plena conciencia de las implicaciones socio-politicas de sus reclamos.