Bohios intelectuales en la era de la complejidad

    Quizas la mejor manera de entender las nociones descritas en el previo editorial es la imagen del bohío.

    Tendemos a idealizar el pasado sin darle seria consideración de los costos que sus realidades conllevaban y no hay mejore ejemplo que el caso del bohío—casuchas de paja y alguna madera.  En el cuento de La Caperucita Roja, el primer hogar en ser destruido por los vientos apulmonados del lobo fue el bohío.  Aunque un cuento de niños captura algo sobre la integridad de los mismos; ante fuertes vientos huracanados, se desplomaban.  Como en todo, hay sus excepciones.[1]   No obstante, el jíbaro del pasado dado la opción de tomar una casa de concreto reforzado y un bohío, escogería la primera.

    En el Puerto Rico contemporáneo, los bohíos actualmente no han ‘desaparecido’, si los definimos como una construcción ‘a mano’ sin criterios de ingeniería en su diseño o construcción.  Se pueden ver  ‘bohíos’ a través de toda la isla: caducas construidas de madera que sobremiran barrancos.  Utilizando largas columnas de bloques de concreto puestas una sobre la otra, estas logran ‘milagrosamente’ sostenerse—hasta la llegada de un contratiempo natural: demasiadas lluvias, terremotos, o nuestro ‘fiel compañero’ el huracán. 

    La razón por la prominencia de las mismas es fácil de entender: son mucho mas baratas de construir y mantener.  Lo mismo con los diplomas académicos.

    Ante pobres recursos, buena cara

    Un enorme numero de diplomas que se están otorgando son de baja calidad, permitiendo el fenómeno de ‘gato por liebre’.  Aunque el papel es el mismo, la gran variabilidad de criterios, trabajos y destrezas requeridas para un diploma implica que no todos tendrán el mismo valor—algo que los ‘compradores’ útimos de los mismo (los empleadores) no tendrán conocimiento.  

    Como en los casos de los bohíos tradicionales y contemporáneos, Es claro que la razón por el fenómeno es la falta de ingreso para sostener criterios fidedignos de los mismos.  Un alto numero de los estudiantes trabajan a tiempo completo, dando que aun si tienen los recursos carecen meramente del tiempo para el cual dedicarle al estudio.  En vez de estar leyendo un porciento sustancial del dia, le dedica uno que otro momento, dando que puedan meterse de lleno en sus metodologías y conocimientos.

    Como en el caso del bohío tradicional, los grados en la superficie podrán ‘funcionar’, pero se desploman ante la mas minima presión o contratiempo externo.

    Una posible manera de lidiar con el asutno, para empezar, es meramente otorgando ‘grados’ al tipo de diploma y las instituciones que los sotierren—algo posiblemente sejemante a ‘Moodys’ con los malos bonos puertorriqueños.  

    Se puede establecer una serie de criterios objetivos para poder establecer la medida no tan solon de las instituciones sino de la calidad del diploma sostenido en la mano por el candidato: AAA, BBB, CCC o como sea que se evalúan esas cosas.  Dicha medida, obviamente no sera una medida final y firme necesariamente de la originalidad del candidato, sino meramente para establecer los mas mínimos criterios que estén públicamente disponibles.

    Podemos sugerir varios modelos y casos

    Al nivel institucional, podemos establecer dos rangos generales ‘por categoría genera’, y para luego asignar varios rangos dentro de cada categoría.  Pienso aquí posiblemente en la noción de ‘universidad’ y ‘colegio’ (college).  Es claro, por ejemplo que la Universidad InterAmeircana deberá de ser denominada como un ‘colegio’ al igual que varios recintos de la Universidad de Puerto Rico. Digo esto porque carecen de sólidos recursos de investigación seria y fidedigna. Si, me refiero a la InterAmericana Metro.

    Al nivel del diploma del individuo, fácilmente se podría establecer un algoritmo que ayude a establecer el rigor y calidad general de la tesis doctoral.  Dicho algoritmo sera una formula general meramente para utilizar como ‘base de evaluación’, que obviamente no incluirá la contribución formal del estudiante, sino proveerá una noción general del trabajo que conllevo la tesis. Por ejemplo, en el caso del campo de historia, podríamos incluir en nuestro algoritmo factores como: 1) numero de archivos utilizados 2) numero de cajas estudiadas 3) numero de fuentes secundarias 4) cantidad de citas al calce con futres 5) numero de fuetes únicas en las notas de la tesis, etc.

    Este sistema, un “Moodys académico” ayudara a prevenir el fraude académico que esta ocurriendo al momento en la isla, en el cual diplomas de poco valor se entremezclan con sus contrapartes.

    En la actual era de la complejidad, tenemos que evaluar caso por caso, sin la facilidad que previamente se tenia en el cual fácilmente se podían agrupar instituciones y departamentos en fáciles categorías.

    NOTAS

    1. Los bohíos actualmente eran mas duraderos de lo que nos podemos imaginar, como descrito por Iñigo Abad. Al tener leves parecer, reducía las enormes presiones creadas por vientos huracanados.