Cuando el sol mato a la estrella

    La marihuana, y las drogas en general, no son el unico obstáculo y peligro que enfrentan futuros intelectuales y/o futuros académicos.  A pesar de la presunción del buen intelectual, en el cual cada uno hace lo suyo y trata de mejorarse en su particular campo, el hecho es que toda esfera social esta minada por otros quienes activamente participan en su detraco.  El fenomeno se ve incluso en familias, y es particularmente notable del mediocre.

    Sea por malgasto de oportunidades académicas, por carencia de masa craneal, o simplemente por vagancia, el mediocre se encuentra en una posición económicamente vulnerable.  Peor aun, tiene completa conciencia de su débil posición y pobres expectativas del futuro, lo que hace que el mediocre sea particularmente feroz en derrotar cualquier rival por los recursos económicos que le rodee, sean estos recursos de mayor o menor escala.  El mediocre, en comparación con el intelectual que se 'pierde' en el tema de su estudio, esta en constante análisis y observación del campo social de quien lo rodea.   Mientras que el intelectual típicamente se aísle del mundo social, entrando en el mundo de los libros, los papeles académicos, los archivos, o las estadísticas, el mediocre se entraña mas en el ámbito que le rodea, buscando establecer y desarrollar alianzas para reducir su débil posición.  Mientras que el intelectual busca añadir al caudal socioeconómico de su comunidad, el mediocre busca apropiarse del que existe, tratando de limitar su acceso a otros.

    Los mediocres se ven en todos lados.  Algunos campos academices tenían incidencias particularmente altas en estos.  En la Universidad de Texas, recuerdo como aquellos en los cursos avanzados de calculo se reían de los que tomaban los cursos 'de niña' de matemáticas que se les daba a aquellos en buscqueda de su MBA o grado de 'administración' y/o 'contabilidad'.   No que estos fuesen incompetentes, pero el nivel de rigor y sofisticación entre un campo y otro variaba grandemente; uno no puede evitar de contemplar si muchos de los problemas del mundo contemporáneo se debe meramente a que aquellos en poder carecen de la masa craneal para entender adecuadamente la naturaleza y carácter de los problemas ante ellos.   Me imagino que le deberíamos de preguntar a Richard Carrion si este es el caso.

    Pero lo tragico de la relación que se da entre el 'mediocre' y el 'intelectual'--arqetipos que estamos aqui definiendo--es que ocurre en las esferas donde uno menos se lo imaginaria: la esfera domestica.

    Charles Darwin una vez comento sobre la natural competencia que se daba entre los hijos por los recursos de los padres; es una competencia que se da (en teoría) hasta cierto punto debido que los hermanos comparten genética común. Por lo tanto, esta competencia tiende a frenarse hasta cierto punto, cuando la vida del otro este en peligro, o cuando algún serio daño corporal llega a ocurrir.  El campo de la sociobiología ha explorado estos asuntos con un sorprendente nivel de capacidad predictiva en su análisis.  Lo mas curioso del campo es que, cuando se indaga detenidamente, vemos patrones de conducta entre los seres humanos y los animales que uno jamas se imaginaria; algo que ciertamente trae en cuestión el nivel y/o cantidad de 'libre albedrío' que tienen todos los seres humanos en sus decisiones cotidianas y/o no tan cotidianas (extraordinarias durante tiempos de crisis).

    Aun así, entiendo que Darwin y los psicólogos evolucionistas erraron hasta cierto punto.  Una madre con una grande cría, viendose en una posición desfavorecida, puede demostrar conducta viciosa ante sus familiares a un nivel inimaginable.  Esta cruel conducta no necesariamente se reflejara en actos de violencia física, mas típico patrón del varón, sino en actos de pura violencia psicológica.  Viendo su posición desfavorable y sabiendo que su posibilidad de algún tipo de 'éxito' económico (clase media, por ejemplo), la madre mediocre peleara con garras y uñas en contra de todo rival.  Entrañara una serie de persistentes y consistentes ataques verbales--criticas, comentarios, chismes--que desgastara su rival lentamente a través de un periodo de tiempo prolongado.  EL fenómeno es semejante al continuo pero 'eterna' choque entre la pequeña gota y la enrome piedra; a través del tiempo, el diminutivo gotereo desgastara la enorme piedra, rompiendo en la mitad.  Lo que inicialmente pareció ser meramente un disgusto se convierte en la perdición del intelectual.

    Ojo con el mediocre; su impacto podrá ser mas nocivo del presumido a prima facie.