Culpen a Pedro y sus secuaces: La Junta Fiscal como ejemplo la doctrina de Shock (Naomi Kline)

    No puede haber duda que la crisis que estamos sufriendo ahora es el resultado de la corrupción y las malas decisiones de Pedro Rossello.  Es lo que en ingles se conoce como un double whammy: un un doble macanazo debido a que 1) se eliminaron las 936 y 2) el gobierno asumió una enorme cantidad de deuda.

    Sin duda, las irregularidades vienen desde hace mucho tiempo: en particular me refiero a la deuda extra constitucional, que por definición era illegal y nunca debió haberse incurrido.  En este sentido, Rossello es parte de un patron mayor, aunque ciertamente el abierto y cruda corrupción de su administracion quizás fue unas de las mas contundentes.

    Pero, sabiendo esta situación, también podemos hecharle la culpa a los líderes que le siguieron: Sila, Anibal, Fortuño y Alejandro.  Estos, la gran mayoría populares, en este sentido son secuaces de Rosselló, al igual que Fortuño quien llamo a Rossello un cancer. 

    Es decir, sabiendo que una enorme merma de ingresos venia con la cancelación de las 936, las administraciones que le siguieron a Pedro Rossello cometieron el error de no contraer el gobierno en consoné con la reducción de ingreso.  

    Mientras que es fácil entender su decisiónno tan solo por razones políticas sino socialeslo cierto es que pospusieron el cobro de dicha deuda para el futuro.  Siempre es mas fácil dar al impresión que todo esta bien, para así no asumir la totalidad de consecuencias políticas de hacer lo que se tiene que hacer. Pero, igualmente, cuando estalla ya bomba, lo que no tomaron decision responsables son igualmente culpables de la crisis. 

    ¿Había otra salida para los gobernantes que le siguieron a Rossello?  Esto es una pregunta difícil de contestar, pero haremos una breve discusión del asuntoque conllevara naturalmente una discusión de la historia de teorías económicas.

    La teoría económica que ha predominado el pensamiento económico fue la de John Maynard Keynes.  Como señalo el ganador del Nobel en Economía Paul Krugman, a country is not a company. La noción que una nación se tiene que administrar como finanzas personales es errónea debido la complejidad de relaciones que ocurren en una economía.  Este error es lo que acelero la Gran Depresión mediante las políticas fiscales de Herbert Hoover.  Aunque el deficit spending de FDR en el Nuevo Trato disminuyo los peores aspectos de la Gran Depresión, la entrada de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial fue quien la saco de su meollodando que se convirtiera en la mayor economía mundial durante la posguerra.

    Pero el deficit spending de Keynes tiene ciertas limitaciones. La presunción operativa es que el gobierno va a entrar en deuda para estimular la economía, y el mayor tamaño de la nueva economía mas que cubrirá los gastos iniciales que había incurrido el estado.  Como en un pozo, hay que hecharle agua a la bomba antes de que funcione. PERO, si no sale agua; si la economía no crece autónomamente sin el estado, entonces el resultado sera peor, al estado haber gastado su crédito sin resultado concreto.  

    Y parece que esa es la situación en la cual nos encontramos hoy dia.

    Pero, no deberíamos de exagerar la situación.  Como porciento de su GDP, la deuda puertorriqueña no esta fuera de proporción. Hay multiples países que tienen deudas que superan sus economía por cantidades mucho mayores que las de nosotros. Para Puerto Rico es 150%, mientras que para Japón y los Estados Unidos ronda en unos 500% (5 veces). Es importante señalar que la deuda per GDP de Estados Unidos ha estado en aumento durante los últimos años:

    Podemos fácilmente sugerir la noción que la crisis no es nada mas que una crisis de los accionistas: aquellas personas que le compraron bonos a Puerto Rico.  Como Puerto Rico ha dicho que no va a pagar, la búsqueda de ayuda a Estados Unidos dio a un resultado nocivo e inesperado: la Junta de Control Fiscal.

    Sin duda alguna es una crisis construida: algo como la doctrina de shock de Naomi Kline.

    Sabiendo el estado empobrecido de la economía Puertorriqueña, cualquier inversionista hubiese corrido de la situación porque ya era previsible que Puerto Rico iba a entrar en default con la situación de 936.   Es decir, la inversion fue hecha sabiendo que el estado legal impondría en la isla una situación difícil de tener que pagar su deuda extra constitucional, a pesar de no tener los medios para hacerlo.  Son como los cobradores privados que compran deudas que los bancos ya han asumido no-cobrables, para hacerle la vida difícil a los individuos. 

    Lo lamentable aquí es que se han dicho muchas mentiras y falsedades oficialesque dificulta el proceso de esclarecimiento.