Hacienda: Mariposas y Gusanos


Fuente: Josué Montijo / ENDI



La otorgación de varios contratos al hijo de Raúl Maldonado, exsecretario de la gobernación y nuevamente nominado a ocupar la secretaría del Departamento de Hacienda, arroja una elocuente pista sobre la profunda crisis que afronta nuestro país en términos de la administración pública.

A todas luces el discurso de la crisis fiscal, de los ajustes, de la medicina amarga y de las medidas de austeridad supone ser una receta aplicable solo a unos sectores muy particulares de la ciudadanía. Detrás de esa cortina discursiva operan una serie de personajes que capitalizan muy bien con contratos, con ganancias jugosas, con acceso ilimitado a las fuentes de poder y con un margen de impunidad que parece inagotable. Y cuando hablo de personajes sépase que realmente es una variopinta gama que ya no responde a colores políticos ni nada semejante.

Mientras eso sucede, aquellos llamados a dar cuentas ante el país como funcionarios electos, se apertrechan detrás de excusas varias y muy oportunas. A veces dicen no saber nada de nada y se acabó el evento. Otras reparten culpas hacia más arriba como si eso los eximiera de sus responsabilidades. Algunos hasta tratan de justificar lo sucedido alegando que no se puede penalizar a hijos talentosos. Todo esto, claro está, sin renunciar a la invariablemente eficaz opción de montar un operativo mediático para hablar de otros asuntos y desviar la atención.



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